Médicas y médicos especializados en enfermedades infecto contagiosas coinciden en que en Haití, a pesar de que no existe una amenaza de expansión significativa del virus del VIH-SIDA, después de terremoto, una atención integral a las comunidades es indispensable para que ninguna de las infecciones no se propaguen, afectando a la población enferma y la que todavía no sufre enfermedades. Coinciden además en que las mujeres requieren atención especial y lo están haciendo en el contexto.

Una de ellas es la Doctora Marie Merci Sevallos es coordinadora de “Cero VIH/SIDA en Haiti” que trabaja con mujeres viviendo con VIH SIDA. Su organización lleva una década trabajando más con mujeres que con hombres porque ¨¨ellas son las que se reconocen enfermas y acuden en busca de ayuda, además de ser las que atienden a la gente enferma, por lo que necesitan mucho apoyo.¨

Fuentes oficiales del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH Sida (ONUSIDA) estiman que en ese país hay 120,000 personas que viven con el virus y que más de la mitad son mujeres.

Según un reportaje de IPS (Amy Bracen, 2006) el los últimos años se ha estabilizado la prevalencia del virus, a manera que en el 2006 se habían reportado menos de la mitad de casos que el en 2003 y en ese año se sabía que unos 10.000 portadores recibían terapia antirretroviral.

Por otro lado, en un informe recién presentado, ONUSIDA ubica la prevalencia seropositiva de la población adulta haitiana en 2,2 por ciento, frente al 3,1 por ciento de 2003, pero sin que constara una reducción entre mujeres rurales.

La organización que Sevallos coordina atiende directamente 600 mujeres y algunos hombres en la actualidad después del terremoto. ¨En Haiti las personas que viven con VIH SIDA son pobres y con la enfermedad, mas la pobreza y ahora el terremoto, viven en condiciones terribles, además de que les hace más vulnerables el hecho de que todavía no hay atención de ayuda humanitaria dirigida especialmente a personas con el virus¨ dice.

Según la médica, la gran mayoría de las mujeres que atienden  se han ido a vivir a las provincias por que quedaron sin vivienda. ¨Allí no pueden conseguir la medicina retrtoviral, pero se las conseguimos aquí y la llevamos donde estén. Para que permanezcan dónde están pues en la ciudad podrían estar peor¨ aclara.

La organización acompaña a las personas viviendo con el virus ayudándoles a buscar comida y tener una mínima vida digna. ¨El mejor apoyo es el acompañamiento pues cuando una va a ver las personas, te dicen que están contentas que sobrevivieron el terremoto y te cuentan cómo sobrevivieron, pero es cuando ves como están viviendo que te das cuenta de la afectación que están sufriendo ahora en una vida que ya era dura, por la pobreza y por el virus y que ahora se pone peor porque muchos viven en casas destruidas por lo poder vivir a al intemperie o tener tiendas de campaña y la mayoría de ha ido al campo a donde laguna familiar que no tenía lugar para mas gente.¨

Añade que en los lugares fuera de la ciudad no consiguen sus medicamentes. ¨Por eso nosotras se los levamos y les llevamos la ayuda humanitaria que conseguimos.¨ Ha recibido apoyos de la Red de Salud de Mujeres de América Latina y El Caribe a la que perteneces su organización, de la Redde de Salud de Brasil, de Mano a Mano con las Mujeres de Haití en Puerto Rico y del Campamento Feminista Internacional, entre otras.

 

Otro médico entrevistado es Dr. Pape, el reconocido médico haitiano que colocó a su país en las páginas de la historia de los aportes de los países del Tercer Mundo a abordar la pandemia del VIH SIDA cuando en su Laboratorio GHIESKO desde 1982 produjo una formula más accesible para detener el virus de VIH SIDA en personas infectadas con el virus.

Pape coincide con Sevallos en el sentido que la amenaza actual después de terremoto re refiere más las condiciones en que vive la gente infectada. ¨No me preocupa tanto la expansión del virus que se ha estabilizado en el país, lo que más preocupa en este momento se refiere a las condiciones en que vive la gente afectada por el terremoto. “La gente esta teniendo que vivir en condiciones que amenazan su salud en general, por lo que urgen programas integrales de atención” dijo a este medio.

Al igual que Sevallos, Pape sabe de lo que está hablando. Un asentamiento provisional de más de 5,000 personas que se instalaron en los predios de la Universidad de Kuisquella rodea la Ghiesko Clinik ubicada en la misma Universidad. “El problema principal que tiene la gente es la falta de trabajo y la clínica tiene un problema grande también, que es que toda esta gente que vive en carpas precarias, esta ubicada en una zona que se inunda, con lo que ahora con tanta gente, a amenaza de epidemias es tremenda”.

Actualmente la Clínica trabaja para reubicar a la gente en una colina cerca del lugar. ¨Un lugar donde puedan tener casas transitorias anti inundación, anti sísmicas y anti huracanes, por eso estamos trabajando para que gente misma las construya y así tengan casa y trabajo a la vez.”

El nuevo asentamiento va a tener agua potable, alimentación y sanitarios, escuela y energía solar, además de ayudarlo a convertirse en una comunidad transitoria de tres años. El proyecto está siendo apoyado por la Fundación de la Universidad de Cornell de donde Pape es graduado. Cuenta con el apoyo de otras como Fondation Merieu, Fondation Capital Bank y la Fondation Max y Maryse Penette va a aportar para la construcción y desarrollo de una escuela primaria y una vocacional.

Al preguntársele sobre el lugar de las mujeres el médico sostuvo que ellas son un pilar (poto mitán en créole) que apoyadas en sus derechos y condiciones, afectan para bien a sus comunidades. ¨La igualdad de las mujeres es una lucha constante para que cualquier sociedad avance¨ concluyó.

Una preocupación adicional es que en la atención estén incluidas las acciones para atender la violencia contra las mujeres, ya que las violaciones y el hacinamiento en campamentos que propicia prácticas sexuales indiscriminadas y forzadas por las circunstancias de pobreza y falta de poder y privacidad pueden afectar la propagación del virus.

ONUSIDA da cuenta (Voice of America 2010) que en el país que tiene los mas altos índices del virus en el Caribe, la principal formas de trasmisión son las relaciones sexuales.  ¨El riesgo de la violencia y sobre todo la violencia sexual y violencia contra las mujeres presenta un problema grande y un reto en términos de la transmisión del VIH…¨ dijo a ese medio el Director de Apoyo Técnico a Países de ONUSIDA, Tim Martineau, añadiendo que hay siete prioridades para abordar la problemática: reconstruir el sistema de salud, proteger a las personas desplazadas que viven con el virus y reconstruir las redes de personas que viven con VIH SIDA y sus organizaciones.